Por Luis Matos
Coordinador General de Barahona 3 en New York
En nuestro inicio y fundación de Barahona 3, el criterio de esta organización fue dirigida a captar las mejores intenciones de barahonero que siente su identidad y amor por este pueblo olvidado por los mandatarios dominicanos.
Se inicia el desarrollo de la programación con la primera conferencia magistral donde el educador y psicólogo clínico, Yorik Rafael Piña tiene una disertación extraordinaria y conmueve a los asistentes. La continuación de las actividades de Barahona 3 era captar a los “jóvenes traviesos”, como le bautiza el intachable educador y conocedor de los defectos de formación de esta juventud, donde los valores de formación están escaseando por el descuido de las autoridades.
Para nosotros los que conformamos el grupo de barahoneros que ha tenido un buen desempeño como ciudadanos probos, a consecuencia de la formación que nos ofrecieron nuestros mayores y que deseamos una juventud “tallada” en valores, teníamos como primer objetivo involucrar las autoridades de {Macondo} Barahona y así facilitar el regreso de Yorik a Barahona.
Con el regreso de este ejemplar facilitador de la educación y formador de ideas y pensamientos, enfocarnos, junto a las autoridades de este pueblo en la instalación del primer liceo-reformatorio de la provincia. Sería el medio ideal para poder controlar y reencauzar el pensamiento y el accionar de los jóvenes “traviesos”, que hoy forman nuestra sociedad. Nos decidimos a instalar a Yorik Piña en Barahona, donde ya había realizado un trabajo parecido, hace más de 40 años, al que se proyecta desarrollar en Macondo.
Que gran desilusión comenzamos a recibir cuando las autoridades de lugar no se empoderan del proyecto, ya que, sin la presencia de las autoridades, no se lograría tal acción en bien de la provincia con la rapidez que deseábamos.
¿Por qué era de vital importancia el empoderamiento de las autoridades de Barahona para el proyecto? Bueno, con el empoderamiento de las autoridades veíamos la facilidad de poder organizar el Liceo público de reeducación juvenil con el fin de prevenir los males que acosan a los jóvenes de nuestra sociedad hoy en día. Este liceo o politécnico con cierta característica al ya famoso Loyola, tendría como plan piloto mantener bajo constante vigilancia a los jóvenes que fueran reclutados como participantes de un método educativo experimental, dirigido por el creador del novedoso “Sistema Monitorial” en el que muchos jóvenes de la época nos formamos en el que se asesoraba a los padres en la sana formación de sus hijos por las constantes visitas que el director del centro cursaba a los padres de los alumnos. El producto salido de esa actividad educativa realizada en los años 70s es un sin número de barahoneros que son hombres que dirigen grandes empresa y políticos de la nación.
Nuestra meta estaba dirigida a la integración del fogoso Gobernador designado por el Presidente de la República. Creímos que sería el primer personaje interesado en el empoderamiento del proyecto, el que necesitaría de las instalaciones de Centro UASD, localizado en el Barrio de Rio Sito. En este local teníamos las facilidades de tener cierta cantidad de participantes internos para un mejor monitoreo del desarrollo del proceso de reducación.
El programa a ejecutar para esos fines, diseñado por el educador y psicólogo clínico, observaría las necesidades particulares de los participantes y les ayudaría a prepararse con fines de darle un mejor servicio a la sociedad.
Que penoso fue ver, que ni el Gobernador ing.. Peña Rubio ni los diputados por la provincia ni el Senador Eddy Mateo, gran conocedor del valor de una buena formación académica, ignoraron por completo el plan de Trabajo que estaba proyectando la Asociación Barahona 3 para ayudar a la sociedad barahonera a salir del fango donde estamos metidos hoy.
La indiferencia y el desinterés que mostraron las autoridades por dicho proyecto, nos hace variar la proyección del programa de Barahona 3.
Comprendiendo que en este pueblo elegimos autoridades que no tienen interés alguno por el desarrollo y la paz de Barahona, tan necesaria para el mismo, nos vimos a punto de perder la oportunidad de que Yorik Pina regresase a Barahona.
Aquí es donde entra la Visión de un gran ciudadano barahonero, El Dr. Julio Vargas, quien se empodera de forma personal y facilita el retorno de Yorik a trabajar en el “Programa de Reeducación Para Jóvenes Traviesos” que, por la falta de “empuje” de las autoridades se ha visto desacelerado y se ha tenido que desviar la atención a la instalación de un Centro de desintoxicación para hacer la actividad autogestionaria por el poco respaldo que ha tenido del sector oficialista.
¿EL porqué de este cambio? Bueno, la facilidad que nos daba el complejo de edificios de la UASD era el lugar perfecto para este proyecto. Hoy dicen que será para el desarrollo de la cultura. Donde se ha visto cultura si no hay educación y formación de los ciudadanos. El plan era que los jóvenes que cometían delitos, en vez de pasar pena en una cárcel, fueran enviados a este centro de estudio y formación donde pudieran cumplir sus sanciones y educarse por el bien de la Nación.
Hoy nos sentimos mutilados y defraudados de las autoridades que tienen las obligaciones para con los ciudadanos y el asegurar un futuro promisorio para la juventud de nuestro Barahona.
Penoso es ver como se frustran las posibilidades a un pueblo por la falta de voluntades de sus autoridades.